El link building es uno de los pilares fundamentales del SEO. Consiste en obtener enlaces desde otras páginas web hacia la tuya, con el objetivo de mejorar tu autoridad de dominio y posicionamiento en los motores de búsqueda. Sin embargo, no todos los enlaces son iguales ni todos aportan el mismo valor.

En un entorno cada vez más competitivo, Google evalúa factores como la relevancia, naturalidad y calidad de los backlinks para determinar qué webs merecen estar en los primeros resultados. Por ello, no basta con conseguir enlaces de forma masiva; es crucial hacerlo estratégicamente.
Si quieres que tu estrategia de link building sea efectiva y sostenible a largo plazo, hay tres recomendaciones clave que no puedes ignorar. Estas te ayudarán a maximizar el valor de cada enlace, mantenerte en línea con las directrices de Google y evitar penalizaciones.
A continuación, te explicamos cómo implementarlas paso a paso.
1. Enriquece semánticamente tus backlinks
Google no solo analiza el texto del enlace (anchor text) o la página de destino; también presta atención al contexto en el que se encuentra el backlink. Esto significa que el contenido que rodea al enlace juega un papel crucial en su relevancia y valor SEO.
¿Cómo aplicar esta estrategia?
- Incluye palabras clave relacionadas o sinónimos en el texto circundante al enlace.
- Por ejemplo, si tu objetivo es posicionar “fontaneros Madrid”, utiliza términos como “fontanería”, “reparaciones” o “servicios de fontaneros en Madrid” en el contenido cercano al backlink.
- Asegúrate de que el texto fluya naturalmente y esté alineado con la temática principal del artículo donde se encuentra el enlace.
Por qué funciona: Cuando Google detecta una relación semántica entre el enlace y su contexto, lo considera más relevante para las palabras clave asociadas, lo que puede mejorar tu posicionamiento en esas búsquedas relacionadas.
2. Varía los textos de anclaje y atributos de los enlaces
Uno de los errores más comunes en link building es repetir constantemente el mismo texto de anclaje o abusar de los enlaces dofollow. Esto puede levantar sospechas ante Google y hacer que tu perfil de backlinks parezca artificial o manipulado.
Buenas prácticas para diversificar:
- Usa diferentes tipos de textos de anclaje:
- Exactos: Incluyen la palabra clave principal (ejemplo: “fontaneros Madrid”).
- Parciales: Combinan la palabra clave con otros términos (ejemplo: “servicios de fontaneros Madrid”).
- Genéricos: Frases como “haz clic aquí” o “más información”.
- Alterna entre enlaces dofollow (que transmiten autoridad) y nofollow (que no lo hacen). Esto es especialmente importante si trabajas con posts patrocinados o colaboraciones pagadas.
Ventaja clave: Un perfil variado no solo parece más natural a ojos de Google, sino que también reduce el riesgo de penalizaciones por prácticas consideradas poco éticas o manipuladoras.
3. Apunta más backlinks a tus URLs más valiosas
No todos los enlaces deben distribuirse por igual dentro de tu web; algunas páginas necesitan más fuerza que otras para destacar frente a la competencia. Por eso, es importante priorizar las URLs que aportan mayor valor a tu negocio o estrategia digital.
¿Cómo identificar estas URLs?
- En un ecommerce: Las páginas de categorías o productos más vendidos suelen ser las más importantes para generar ingresos.
- En un blog: Los artículos que atraen más tráfico orgánico o generan conversiones significativas deberían ser tu prioridad.
Consejos para optimizar esta estrategia:
- Planifica una distribución gradual: No envíes demasiados enlaces hacia una misma URL en poco tiempo, ya que esto podría parecer artificial.
- Asegúrate de que los backlinks provengan de sitios relevantes y con buena autoridad dentro del sector para maximizar su impacto positivo en tu posicionamiento.